
Ingredientes: 1 envase al vacio de tiras de pimientos verdes y rojos asados (en mi caso de la marca Campo Rico), bacalao salado desmigado, 3 dientes de ajo, aceite de oliva virgen extra.
Preparación: abrimos el paquete de pimientos, le escurrimos algo así como la mitad del jugo (que si no queda un poco encharcado para mi gusto) y lo volcamos en un bol. Rallamos o picamos un diente de ajo y lo echamos por encima. Lavamos bajo el grifo unas tiritas de bacalao (unas pocas, no el paquete entero obviamente) para quitarles el exceso de sal y las desmigamos con las manos sobre los pimientos. Cortamos los dos dientes de ajo que nos quedaban en láminas (no muy finas) y lo freimos hasta que esté doradillo. Añadimos un poco de aceite de oliva virgen extra, removemos bien los pimientos con el bacalao y adornamos con los ajos fritos. Moraleja: ya es primavera en Falsarius Chef.
Nota para observadores: los ajos de la foto, obviamente, no son ajos fritos. Son unos ajos confitados en aceite muy ricos que tenía en la despensa. El hecho de recomendar hacerlos fritos y no usar de bote es porque he tenido experiencias contrapuestas con los envasados: a veces muy buenos y en otras marcas, sencillamente decepcionantes. Así que he decidido apostar por lo seguro.